Siempre se ha dicho que en la NBA se paga un alto precio por el centímetro en los center. También se dice (a veces) que se puede caer en el error de fichar a un hombre alto que no te aporta nada en ataque y muy poco, salvo intimidación (en ocasiones ni eso), en defensa. El denominado "cacho de carne", alto y fuerte pero que no tiene tiro, casi no entra en la lucha por los rebotes y apenas tiene fuerza (ya no hablemos de que sea inteligente en pista). Pero si hay alguien que saca un sobresaliente en todos los apartados ese es el actual pívot titular de Memphis Grizzlies.
Marc Gasol no solo es actualmente el mejor español en la NBA, sino que, además, es uno de los mejores pívots de la liga. Un jugador que tiene un tiro muy seguro combinado con un gran rebote (media de doble doble); tiene una gran habilidad para asistir comparado con los demás jugadores en su posición pero sobre todo (y lo que le hace más especial) es que es tremendamente inteligente en la pista.
Mucha culpa de lo que está logrando Memphis la tiene Marc Gasol. No solamente por las estadísticas que aporte al equipo. Es uno de los interiores más completos que hay en la liga. Encontrar a un Center que sepa moverse con y sin balón de manera inteligente es muy complicado. Sabe cuando un compañero ha creado un espacio, cuando es él el que tiene que crearlo con una pantalla, cuando tiene que hacer el pick n' roll, cuando lanzar el pase idóneo a un corte por el centro o a la esquina para el triple, o cuando salir de manera justa a la ayuda defensiva. Todo eso no lo hacen sus centímetros (que los tiene) ni su garra (que también la tiene) ni sus buenísimas estadísticas (por descontado). Eso lo hace un jugador con mucha cabeza y mucho coco, que ve el baloncesto con la mente de un base.
Hay que valorar la importancia que tiene tener un jugador de estas características. Es capaz de ser un base improvisado cuando el juego está atascado, pero con una ventaja: sacar siempre superioridad en la zona en casi todas sus acciones. En cuanto a variantes ofensivas: si se planta en el poste alto, puede o bien repartir asistencias hacia el exterior buscando un triple o bien buscar un tiro. Si es en un lateral del perímetro, siempre sabe esperar al corte perfecto para facilitar la canasta o usar el pick n' roll. Todo ello buscando el rebote ofensivo en las mejores posiciones. Por lo que respecta a las variantes defensivas, tiene la suerte de que su altura y su corpulencia hacen que de primeras intimide. Encima sabe hacer flash para las ayudas y tiene capacidad taponadora. Un center inteligente con capacidades físicas para jugar al baloncesto en su posición: qué bendición.
A los equipos siempre les gusta tener pívots fuertes, poderosos y que intimiden. Memphis tiene la suerte de tener uno de los mejores (sino el mejor) juego interior de la NBA. Zach ha mejorado su habilidad para asistir, pero, por lo demás, es el complemento perfecto a Marc. Para jugar al baloncesto ayuda tener centímetros. Pero este deporte también es para inteligentes. Marc tiene la suerte de serlo; Grizzlies tiene la suerte de valorar la importancia de un center inteligente.
Fotografía: www.cope.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario